DECONSTRUYENDO LOS CÓDIGOS DE LO «CASUAL»
Una colección construida para demostrar que las prendas categóricamente «informales» se pueden confeccionar, elegir y llevar con tanto cuidado, discernimiento, oficio e ironía como cualquier vestido de noche o esmoquin. Ferragamo deconstruye los códigos de lo «casual» para luego reconstruirlos con un espíritu de precisión liberada y expresión fluida, con códigos compartidos entre los géneros.
Las prendas femeninas presentan espectaculares volantes, un elemento básico de los trajes de noche, pero expresados en un punto versátil. Una forma tradicional de traje de noche se interpreta de forma poco convencional en tiras flexibles de shearling subproducto afeitado. Un body de punto, intrínsecamente sencillo, se lleva debajo de una minifalda de cuero. Una trinchera incorpora un cinturón y un pañuelo en su estructura para crear una prenda versátil que puede llevarse de múltiples maneras.
En la ropa de hombre se mantiene el esqueleto de una silueta formal, pero se reduce la complejidad innecesaria en chaquetas de construcción suave con chalecos insertados. Las parkas acolchadas Gancini, los jerséis y las sudaderas de nylon sostenible integran los códigos de Ferragamo en la sustancia material de las prendas técnicas. Ambos géneros acceden a un athleisure mejorado a través de pantalones de chándal de lana de pelo de camello, cárdigans y jerséis entregados con detalles artesanales.
Se añade a la línea un suave bolso bucket, con el característico cierre Gancini y una base con tachuelas. Está confeccionado en ternera granulada en la gama de colores italianos de la temporada: Azul Ghiacciaio, Verde Nebbia, Azul Agrifoglio, Rafia, Verde Aghi y Rosa Amaretti.
Un nuevo diseño de bolso se presenta en forma de media luna con un acabado de sellería: éste presenta la importante cadena revestida de cuero que también sirve como acento de joyería en toda la colección.
Los nuevos estilos de running retro unisex vienen con una suela en forma de arco iris que hace referencia al icónico zapato Rainbow de Salvatore Ferragamo de 1938. Las botas para la nieve, los mocasines y las zapatillas de montaña cuentan con suelas de tacos ultraligeros y proporciones sutilmente voluminosas en piel de becerro de gran tacto. Los icónicos herrajes Gancini se aplican a éstas y a una nueva bota de combate, colocados para lograr un efecto irónico y sorprendente.
Alberto Zapata para LEXQUISITE Mag
